A lo largo de los años, el alojamiento web ha sido juzgado por la velocidad, la fiabilidad y el tiempo de actividad. Las empresas aceptaron periodos cortos de downtime como un peaje inevitable, análogo a las sacudidas esporádicas en un vuelo transcontinental. Pero, ¿y si la innovación pudiera predecir la https://normanl271nyi8.blog-ezine.com/profile