Si no tenían dinero para pintarse los pelos, cogían una barra de labios, la estrujaban y se coloreaban el pelo de rojo; si se llevaban los zapatos de charol y no podían comprarlos, compraban pintura de aceite y con los zapatos pintados se iban al Zalima. Cuando salían estaban ya https://rafaelcecwr.blog5star.com/37003165/5-simple-statements-about-camión-pluma-para-proyectos-industriales-en-las-cabezas-de-san-juan-explained